martes, 5 de junio de 2012

La Pelea


Cruza tu mirada con la mía y frunciré el entrecejo así lo indica la ley de la calle donde los ojos de las bestias resplandecen al mirarse.

Acércate a mi con paso decidido, meneando tus mas mortíferos músculos y apretare el puño dentro de mi bolsillo veré la tormenta desatarse en el espacio reducido que quede entre nosotros.

Maldiceme, a mi, a mi familia de sangre y a mi familia del camino escupe mierda por tu boca y solo te mirare mas profundamente aun y sonreiré.

Libera tus armas, tus garras, tus puños de hierro, tus dientes afilados tus pies de toro aferrándose al suelo y yo liberare las mías pulcras resplandecientes listas.

Asenta tu primer golpe, golpea mi pecho y derribare tus dientes.

Golpea mi cabeza hazla sacudirse hasta que no pueda recordar ni mi nombre y masacrare tu caballete hasta que quede plano ligado a tu cara.

Desenvaina tus navajas tus cuchillos haz bailar su luz en la resplandeciente noche en la dura calle.

Libera tus hojas sobre mi cuerpo atrévete a cortarme y yo desenvainare a mis hermanos y abriré un corte de punta a punta de tu pecho y te tirare al suelo como la tormenta derriba un árbol y masacrare tu existencia rota en el suelo y quebrare todas tus costillas y haré que escupas sangre y viseras y ...